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A pesar del clima que se vivió ese fin de semana, juventudes de algunas ciudades de la Araucanía y parte del Biobío, se dieron cita para el encuentro que giró en torno al texto lema de la jornada, el que se encuentra en Hechos 2:42 y que dice: “Todos los creyentes se dedicaban a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión fraternal, a participar juntos en las comidas, entre ellas a la cena del Señor y a la oración”

En esta oportunidad los pastores, Andrés Torres Córdova y Carlos Maitri Solís, fueron los encargados de entregar la palabra. Esta se dividió en dos temas durante la jornada, cada uno seguido de talleres, momento en que los asistentes pudieron reflexionar y ahondar en el mensaje entregado. En el primer tema, el pastor Torres invitó a analizar las causas de que una generación se aparte de Dios y a pensar en qué se puede hacer en Cristo, para que esta generación y las posteriores permanezcan en Dios. 

Lo anterior, bajo la lectura de Jueces 2: 6 al 9, versículos en donde se lee que luego de la muerte de Josué, se levantaban generaciones completas en Israel que no conocían a Dios, o si sabían de él, no eran realmente conscientes de su poder y adoraban otros dioses. Como sabemos, esto llevó a que Dios levantara jueces para que los libraran de aquellos que los dañaban, pero su pueblo tampoco hizo caso a sus jueces, y cuando estos morían, los israelitas se olvidaban de Dios.  

Por lo mismo, los jóvenes que participaron de este encuentro, en el taller reflexionaron y conversaron respecto a qué se puede hacer en las iglesias para evitar que las generaciones venideras se olviden del Señor, o no lo conozcan de la forma adecuada. Estos tiempos de análisis fueron de gran bendición para quienes participaron. 

El segundo tema, a cargo del pastor Maitri, estuvo centrado en las características de la iglesia primitiva, ya que sus reuniones integraban por completo el concepto de “Comunidad”, haciendo relación también al texto lema mencionado anteriormente, con énfasis en cuatro puntos base: oración, comunión, enseñanza y alimentos, componentes clave de esa primera iglesia. 

Los jóvenes de la Iglesia de Contulmo, indicaron que en esta actividad aprendieron de “la importancia de vivir en comunidad y valorar a las personas que nos han enseñado del Señor y de hablar de él en distintos contextos, y a su vez, aprovechar de compartir entre nosotros”. (Fuente: Instagram @jovenes_acym_contulmo). 

Que el Señor bendiga a su juventud y que este tipo de espacios de crecimiento en torno a la palabra de Dios puedan rendir sus frutos. Los invitamos a revisar algunas fotografías de este evento, gentileza de la Directiva de la JEA Tercer Distrito.